jueves, 15 de octubre de 2009

"Este jueves, un relato" Convocatoria literaria


LA DUCHA


Damián adoraba su trabajo, le había costado mucho encontrar uno en el que disfrutara, pero lo había conseguido, desde su silla observaba cada día la misma rutina de ella que para él sin embargo lo era todo menos aburrida.

La ducha era el ritual previo de cada día y Sonia siempre tenía la misma rutina, al llegar junto a ella se desataba el albornoz que la mantenía caliente hasta el momento de meterse en el agua siempre demasiado fría para su gusto, lo colgaba del perchero que estaba junto a ella y giraba el mando hasta que el agua caía con toda su fuerza.

Sonia introducía primero un pie, siempre el derecho y poco a poco el agua iba humedeciendo su pierna, despacio, desde abajo hacia arriba, hasta llegar al muslo tan bien contorneado por el ejercicio diario, después la otra recorría el mismo camino hasta que ambas brillaban humedecidas.

Le seguía la espalda que cuando recibía el fuerte chorro de agua se curvaba hacia delante consiguiendo que su piel se erizara por completo al contraste de temperatura, girándose a continuación para que el agua resbalara por su cabeza, su cara y su torso, el movimiento de su pelo mojado era el momento preferido de Damián, entonces su sangre comenzaba a bombear con fuerza en sus sienes y su mente viajaba al momento en que la vio por primera vez entrando en la piscina para su entrenamiento diario, lo supo al momento, tenía que ser suya y si no de nadie más.

Sus intentos por conocerla fueron siempre infructuosos, ella sólo tenía ojos para aquel tipo que no se la merecía, ese prepotente que se creía que con ir a buscarla todos los días al final de la tarde para llevarla a casa tenía autoridad plena para considerarla suya, pero eso ahora ya no importaba, ese tipo había desaparecido para siempre aunque ella todavía no lo sabia.

Hoy sería el día en que él la poseería para siempre, lo tenía todo muy bien pensado y el sótano de su casa preparado, incluso había puesto una ducha nueva especialmente para ella, le había costado mucho trabajo pero imaginarla duchándose sólo para él le había animado a llevar a cabo todo su plan, incluso a buscar desesperadamente este trabajo.
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Cuando el idiota de su novio no llegara a recogerla le daría el margen suficiente para llamarle por teléfono unas cuantas veces, total no iba a contestar, y entonces cuando ella estuviera ya muy preocupada él se ofrecería a llevarla a casa, ella aceptaría sin dudarlo, estaba acostumbrada a confiar en él, no en vano era el socorrista de la piscina.
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16 comentarios:

  1. Y eso que los socorristas suelen ser tíos "cachas", a éste hay que añadirle un tornillo suelto.
    Somos complicados, increibles, retorcidos.
    La ducha en el cuerpo de una chica potencia el desbarajuste del demente. ¿Quien adivinaría sus elucubraciones?
    ¿Será como aquel famoso coleccionista de la peli? En un sótano la quiere para él solo y todo lo calcula.
    Inquietante, para borrarse del club deportivo.
    Has conseguido un relato de ducha peligrosa, bsito, natalí

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  2. Me parece que esto no pinta nada de bien para la chica que le gusta lucirse bajo la ducha.
    El socorrista me da miedo... o me atrae no se, lo cierto es que estoy ambivalente. Como dice nataí suelen estar cachas y por ahi bien, pero lo de la ducha privada, como que no.
    He disfrutado muchisimo con tu relato de intriga ducheril.
    Besos

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  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  5. Muy bueno, este relato, francamente
    Què siemple se construye un razonamiento de alimaña.
    De què manera brusca, se me despuès todo el deseo.
    Se me ha formado un glu y en mi garganta, esto tarda en despejarse.

    Tèsalo

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  6. Caray con el socorrista, que malas intenciones lleva....y el pobre novio de Sonia, a saber que habrá hecho con él.
    Y ella, tan confiada con él en el coche, uyyyy.
    Muy buen relato, Mar.

    Un besito

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  7. Terrible! esas fantasías que le pueden costar la vida a una persona y la libertad a otra, como es la mente humana.
    Un relato de suspenso, muy bueno.

    Besos.

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  8. Interesante, y me quedo en el punto de Tésalo... hay que ver que cualquier detonante es pasto de las mentes enfermas... deformadas, en este caso por el mutable contorno de unas gotas en la piel de una mujer...
    Menos mal que yo se nadar... uf...
    Un saludo!

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  9. Cada vez más frecuentes las fantasías patológicas que se nos ocurren a los humanos... Da miedo, y tú lo has descripto creando la atmósfera perfecta que nos inspira mucho temor por el futuro de esa chica. Un beso.

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  10. He disfrutado de la originalidad al enfrentar este tema, acabas de leerlo y la idea del socorrista perdura en el pensamiento.
    ¿Le saldrán imitadores?

    Yo por si acaso tengo un kilo de roña, jajaja.

    Un abrazo y un ¡Olé! por esta capea.

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  11. Precioso blog el tuyo. Un placer haberme pasado por aquí.

    saludos y un abrazo!

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  12. Vaya, el tuyo si que es original, es increíble como las obsesiones nos pueden llevar a comportamientos límites con toda naturalidad, a veces da miedo, miles de besossssssssss.

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  13. Uuuff...qué inquietante... esta no es una historia tan descabellada, no creas, que hay cada uno por ahí suelto... (vaaaale, y cada una también...)Me ha gustado mucho. Sí.

    Muchos besos

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  14. Hola Mar.
    Una historia llena de "cordura". Por que la vida tiene de todo.
    Un relato muy bien escrito.
    Besos.

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  15. Hola Mar

    Hoy te traigo un premio que quiero compartir contigo. Me lo dieron hace unos dias, y hasta hoy no he tenido tiempo de pasarme.
    Desde luego, para mi tu blog se lo merece más, por todos estos relatos que nos regalas continuamente, tan bien escritos.
    Para mi tu Blog es de Oro.
    Espero que lo aceptes.
    No tienes que venir a recogerlo, te lo he traido. Mira, pincha AQUI

    Besitos

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  16. Me ha gustado. En parte por su intriga, y en parte por como "te lleva" el relato.

    Saludos

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Una voz fuerte no puede competir con una voz clara, aunque esta sea un simple murmullo.
Confucio