Estoy en una isla, y solo quiero recrearme en el paisaje, en lo que me rodea en este momento, en todos los detalles, sentir los olores, los sonidos, sentarme tranquilamente en la blanca arena, tibia porque el sol la ha calentado durante todo el día, con el suave susurro de las olas del mar de fondo , con el murmullo del viento al chocar contra las hojas de las palmeras, con el dulce trino de los pájaros al atardecer, donde puedo ver una bonita puesta de sol perdiéndose en el horizonte mientras me deja unos colores lilas y rosados entremezclándose en el mar.
Quiero estar perdida en esta isla por un buen rato y pensar por una vez en mí, sólo en mí, quizás suene egoísta pero a veces necesito ese egoísmo; gracias a él y a esta isla encuentro la soledad que necesito en este momento y gracias a esta soledad recorro todos los caminos que me llevan hacia mi interior, donde a veces no quiero mirar por miedo a lo que puedo encontrar.
Esta isla es mi refugio, el lugar en el que me puedo olvidar de mis temores, de mis obsesiones, de mis dudas y mis complejos, un lugar donde no necesito el reconocimiento de los demás, donde yo me gustó a mí misma y con eso me basta.
Un lugar donde puedo tumbarme al sol, donde el mar baña mis pies y puedo inspirar profundamente y sentirme en paz.
Esta isla es lo que necesito cuando quiero sentirme a solas conmigo misma, cuando estoy confundida, cuando no sé lo que está sucediendo, cuando las cosas están cambiando dentro de mí de tal forma que algunas veces me siento asustada, y otras tengo la sensación de estar flotando.
Tal vez pida demasiado, ¿quién sabe?, pero en esta isla me estoy reencontrando con un yo que había olvidado hace tiempo, y me estoy gustando.
A esta isla tambien tú puedes venir siempre que quieras, estás invitado, porque a veces es necesario tener un lugar propio en el que puedes soñar despierto y viajar para alejarte durante un rato de la rutina diaria.
Tan cierto como que estamos vivos, Tan necesario como respirar... Tan difícil como reconocer nuestra cara en el espejo sin máscaras sin maquillaje, y querernos y aceptarnos y mejorar...No es fácil el viaje a esta isla, pero de conseguirlo, seguro que se vuelve uno un poco mejor. Me gustó mucho y esta escala me ha hecho bien, un día de estos tengo que ir...BESOTES!!!!
ResponderEliminarMar, me gusto mucho tu relato y como dice Casandra no nos hace daño ir a la isla de vez en cuando porque cuando regresamos estamos mejor. Yo suelo hacer este viaje, aunque mis hermanas dicen que me he enjaulado :)
ResponderEliminarUn beso!
Ciertamente tienes toda la razón, muchas veces necesitamos de una isla particular, sólo para nosotros, para poder hacer en muchos momentos de nuestras vidas una catarsis completa.
ResponderEliminarBonito y didáctico relato.
Un saludo.
Yo me voy con vos; ah si, me voy con mi libro y mi mate a la otra punta de la isla, para no interrumpir tus pensamientos. Y porque yo también tengo que pensar. Despues nos juntamos si querés y charlamos un rato o nos quedamos mirando el mar simplemente =)
ResponderEliminarun abrazo
...Que gran Isla esta, que todos tenemos cabida, en la que todos nos podemos encontrar a nosotros mismos, cada uno en su intimidad, cada uno en su parcela de arena, con su porción de sol.
ResponderEliminarNo pides demasiado, sólo que esta Isla, a veces está en nosotros mismos y las palmeras no nos dejan verla.
Dulce y esperanzador relato.
Un beso
Un lugar soñado, es lo mejor para pasarse una temporada sin nadie que moleste, ni exija, ni pida. Muy bonito.un beso
ResponderEliminarBonita foto y bonito relato, lleno de sentimientos. En esta isla cualquiera se escaparía para encontrar la paz soñada.
ResponderEliminarUn saludo
Parece ser que todos soñamos alguna vez con una isla como esa, refugio y excusa parta el reencuentro con nosotros mismos.
ResponderEliminarte dejo un saludo desde el bus!
Me ha encantado el relato. Ojala pudiera llegar a esa isla y perderme un rato dentro de mi, fijándome únicamente en ese precioso atardecer y mis sentimientos.
ResponderEliminarUN FUERTE ABRAZO.
Nos has llevado en todos y con todos los sentidos a esa isla, tan necesaria (no es egoísmo apartar un poco de tiempo para quererse uno mismo) y, a la vez, de tan difícil acceso en un exterior sobrecargado de prisas y desencuentros.
ResponderEliminarBikiños
Es vital Mar, frecuentar la isla para acercarse a uno mismo, reencontrarse.
ResponderEliminarSentir tu propio latido, único.
Bonito texto.
Un beso.
mar, a veces necesitam0s estar s0l0s...a veces, un0 se seinte s0l0...a veces, es mas el sentirse s0l0 que el ruid0 del a rutina diaria...unas gentes buscan el retir0, atras el bullici0...
ResponderEliminargracias, mar.
Linda tu isla, no sé por que llegue tan tarde, quizás el poco tiempo, me gusto eso donde me gusto a mi misma, que difícil se nos hace a veces, no?
ResponderEliminarTe comunico que en mi blog tienes un premio dardo que lo estoy entregando a todos los participantes del bus del sábado, si gustas puedes retirarlo. Un abrazo.
anhelo esa isla, la encuentro en las vacaciones sentado frente al mar...
ResponderEliminarTAMBIEN VISITARIA TU ISLA.
ResponderEliminarNECESITO ZAMBULLIRME EN ESTE MAR TOTALMENTE DESNUDA.SI NO ME SUMERJO EN ELLA , ES COMO SI NO ESTUVIESE COMPLETA Y ME GUSTA MAS SI TIENE ALGO DE OLEAJE, AUNQUE AVECES AGRADEZCA QUE ESTE COMO UN PLATO.